Artículos de colaboradores

miércoles, 4 de diciembre de 2013

¿A dónde van los segundos?

Buenos días.

Hoy, quiero abordar sin preámbulo alguno uno de los temas que más quebraderos de cabeza me trae, que más me importa, y que considero es de los más importantes. Es un tema que siempre me ha interesado, y con el que tengo una afinidad innata, ya que siempre que me es posible y puedo reflexiono sobre él.

Me encantaría que me leyéseis, pues voy a hablar de nuestro efímero y valiosísimo compañero, el tiempo.




El tiempo es una de esas cosas que a mi parecer, son inalterables. Esas cosas que existen por el mero hecho de existir y que están ahí, suspendidas en el universo, hijas de sí misma. El tiempo es, por el momento, inalterable e inexpugnable. No puedes ignorarlo, y no puedes hacer como que no existe: el tiempo está presente en todas y cada una de las cosas que te puedas imaginar.

Pero no me gustaría hablaros de esto sin un poco de música... quiero que os relajéis y os encontréis en el mismo estado que estoy yo. Por favor, si tenéis que hacer algo importante o si tenéis muy poco tiempo no comencéis este artículo, dejadlo para más tarde, para cuando estéis más cómodos.

Música, maestro:



Sí, soy consciente de que dura cuatro horas. No tenéis por qué escucharlo
más si no os apetece. Tampoco estáis obligados
para leer el artículo.

Cuando pienso... ¿qué es el tiempo? Me doy cuenta de que no puedo encontrar una verdadera respuesta. Sí, seguramente varios de vosotros podáis decirme lo que ponga en wikipedia, o buscarlo en internet, o darme alguna respuesta previamente estudiada, pero el tiempo no es algo que se pueda estudiar. No es como si tú pudieses coger un segundo y estudiarlo, como si supieses qué es realmente. Un segundo no es sólo un segundo, es todo lo que abarca el mismo, ese segundo en el que ocurren cosas increíbles y maravillosas, a lo largo de todo lo vasto que es el universo.

Por eso no puedo definirlo. Si quisiese hacerlo... debería definir el universo, debería definir todas las cosas que lo incluyen, y de las que se hace poseedor. Pero os invito a pensarlo, y a dejármelo en los comentarios. Para vosotros, ¿qué es, o cómo definiríais el tiempo? Me encantaría saberlo. Tal vez me aclare un poco más las cosas.

Y por otra parte ya no es que no pueda definirlo, si no que... ¿hay alguien que realmente haya conseguido comprenderlo? Es peor que la más complicada de las mujeres, y eso ya es mucho decir.

El tiempo fluye siempre por un mismo cauce, indiferente, inexpugnable e intocable. A veces pasa más rápido, y a veces más lento, pero sólo a tu parecer. El tiempo va a su propio ritmo, sin depender de nada ni de nadie. Es como algo a un lado de nosotros, algo que simplemente nos define.

Cuando pienso en que estoy pensando, transcurren segundos, esos segundos irrecuperables, y que se pierden para siempre. Y cuando se pierden... ¿a dónde van? ¿Van a algún hoyo, alguna especie de recipiente? ¿O simplemente desaparecen, no son nada, y tampoco consiguieron serlo? ¿O lo fueron todo, y por eso ya pueden despedirse, satisfechos con su misión?

Qué ignorantes somos los humanos. Vamos de un lugar a otro, con prisas, tranquilos, unos vagos, otros nerviosos... y no nos damos cuenta de lo valioso que es el tiempo. No sé quién fue el que en su genial reflexión se atrevió a decir la famosa frase de: ''el tiempo es oro.''

El tiempo no es oro. El oro se te puede perder, lo puedes dejar en cualquier sitio, se cambia, se deja atrás, se da... el tiempo no es oro. El oro es demasiado barato como para ser comparado con el tiempo. El tiempo no es oro, el tiempo es vida.

Diréis: ¿por qué dices esto, pedazo de alcornoque? ¿Qué tiene que ver el tiempo con la vida, ni con el oro? Más bien, ¿por qué nos estás soltando todo este rollo patatero?

Bien... paraos un momento, sí. Acabad esta frase que estáis leyendo ahora mismo y parad, parad unos momentos.

¿Lo habéis hecho?

Bien, para los que lo han hecho, y para los que no: con esa simple acción, acabo de cambiaros la vida. Os acabo de hacer ir por uno de los infinitos senderos que os tenía preparados la vida, y os he puesto en una encrucijada. Unas líneas más arriba, os he dicho que paréis, y el tiempo no os ha esperado. Algunos habéis parado, y algunos no. Los que habéis parado, pensad en algo: puede que cuando te vayas a dormir, vayas a entrar a twitter o a facebook tres segundos más tarde de lo que originalmente pretendías a hacerlo, y entonces un amigo tuyo se habrá desconectado, y tú no podrás verle conectado, eso derivará en no tener ganas de hablarle, y nunca comenzaréis la conversación en la que él te dijo que te presentaría a quien sería la persona más importante de tu vida. Y a los que no, tal vez entréis en la misma red social tres segundos antes, pero tres segundos antes un amigo no habrá publicado un post que te interesaría y por el que te darías cuenta de qué sueño querías seguir en tu vida. Pero siempre, habéis actuado por lo que queríais, por vuestras convicciones. Porque no teníais tiempo, porque érais vagos, porque no os importaba esperar...

¿Veis? ¿Os dais cuenta, de lo valioso que es el tiempo, y por qué no deberíais desperdiciarlo?

Cada pequeña decisión que tomáis en vuestro día a día cuenta, así que no seáis tontos. No desperdiciéis el tiempo, y gastadlo con quien queréis, y no con quien os hace daño. Tomad decisiones por lo que creáis correcto, y se os devolverá. 

No, no creo en el karma. Yo creo en el tiempo, en la vida, y en el universo.

Zarrapastrosos y meditativos saludos de un afable vagabundo. 

-Niveus.



No hay comentarios:

Publicar un comentario